6º Día

Este domingo lo reservamos para ir al mercadillo de Teguise. Teguise es un pueblecito que se encuentra en el centro más o menos de la isla, el cual en su totalidad se convierte en un mercadillo, ya que los puestos y tenderetes están repartidos por todas las calles. Lo que puedes encontrar en los puestos no es muy diferente a lo que puedes encontrar en cualquier otro mercadillo, pero es curioso ver como todo el pueblo se vuelca en un común objetivo. De hecho había casas que se convertían en tiendas.
Comentar que más que un mercadillo se ha convertido en un fenómeno turístico y el número de personas que acuden es enorme, con decir que a la entrada del pueblo hay varios terrenos habilitados como parking, donde puedes estacionar por 1,5€.

Después de ver Teguise nos fuimos hasta la playa de Famara, desde la cual se pueden ver los riscos del mismo. Estos riscos son unas paredes prácticamente verticales, desde aquí también se puede ver la isla de la Graciosa.
Después de pasar la tarde en la piscina, fuimos a visitar las salinas del Janubio, de las cuales antiguamente toda la isla se surtía de su sal. Son unas enormes salinas que a pesar de su antigüedad todavía están en funcionamiento.
Desde aquí tuvimos la suerte de poder contemplar un maravilloso atardecer.